El funcionamiento integral de José Luis Cruz Lucatero
Escribe: Javier Lozano Gamiño
Ya en muchas ocasiones el presidente municipal de Apatzingán, se ha convertido en objeto de estudio, y sobre todo de análisis por el óptimo desempeño que reiteradamente ha manifestado en múltiples formas. Esta no es la excepción porque en la clase política siempre hay un contenido que nos hace reflexionar la capacidad que posee cada actor a tomar decisiones. En muchos de estos casos, es inocultable que el tema de la agenda pública del edil José Luis Cruz Lucatero, no salga a relucir como un rubro sobresaliente; también, hemos detectado rasgos y atributos para ejercer una de las responsabilidades mayúsculas de un ciudadano: llevar por buen puerto a uno de los municipios más importantes del Estado, bajo el ejercicio atinado y preciso.
Eso, ha generado la confianza de la sociedad apatzinguense, tanto en el desarrollo de territorio de forma integral, como, en el enorme potencial que alimenta el liderazgo del presidente municipal José Luis Cruz Lucatero. Esa premisa se tiene una relación inherente a partir de la gestión que ha realizado en una de las etapas críticas del país; independientemente del número casos que desafortunadamente han adquirido el virus del Covid-19, es verdaderamente de llamar a atención el esfuerzo sobrenatural para disponer en tal grado de la capacidad humana, como, de cualquier recurso y mecanismos que tenga que ser aplicado a contrarrestar lo más pronto posible el efecto del coronavirus y su no propagación.
De ahí la importancia que ha sobresalido del representante de la sociedad de Apatzingán; no solo movilizó a todo su personal a dar el máximo en la batalla del fenómeno de salud, sino, gestionó la creación de una campaña de difusión masiva mucho antes de que se presentó el primer caso; asimismo, fue crucial tomar medidas anticipadas porque el coronavirus tiene una tendencia altísima y feroz de contagio; inclusive, comenzó de forma estratégica, una vigilancia exhaustiva en puntos clave en el que las personas suelen concentrase en grandes cantidades. (Mercados, tiendas, bancos, plazas públicas, accesos a la ciudad).
Aun y cuando aterrizaron varios programas en dirección a contrarrestar el desarrollo del Covid-19, no han existido contratiempos ni barreras a seguir contribuyendo velozmente a todo lo que sea positivamente útil con la finalidad de identificar cualquier elemento que, en términos de salud, pueda encender los focos. Por ello, acompañado de algunas autoridades del sistema de salud, se apertura una unidad móvil estrictamente hacia la detección de casos hipotéticos de coronavirus. Este hecho, consistió en detectar lo indispensable de la fase acelerada de contagios que existen en todo el territorio Estatal; ante ello, seguramente se reforzó esta acción para que todos los habitantes en caso de tener alguna duda o suspicacia que detecte algún posible síntoma, acuda inmediatamente a realizarse la prueba.
De lo contrario, insistir en mantener las indicaciones que, prácticamente todo los días, el presidente municipal ha hecho hincapié. Entre ellas, el uso de cubrebocas como medida preventiva; lavar las manos constantemente, y seguir tomando una sana distancia que a menudo, dependerá mucho de los lineamientos que adoptemos las veces que por necesidad de laborar, o, simplemente a surtir los víveres para permanecer en casa, a fin de cooperar con la administración municipal que, en términos de trabajo, le ha apostado con tenacidad, fuerza, voluntad, cooperación, colaboración, sobre todo, cuando los méritos y la perseverancia mostró que José Luis Cruz Lucatero, se ha convertido en un gran liderazgo de la región, asimismo, un actor que ha logrado afianzarse una vez que, su función, ha hablado por sí mismo.
El liderazgo político de José Luis va en ascenso. Y, más, cuando existe un enorme cariño por la región que lo vio crecer; eso ha destacado porque Michoacán requiere de actores comprometidos con los temas primordiales de la agenda pública: ese reconocimiento lo ha tenido el edil de Apatzingán, ya que encajó perfectamente en las necesidades en las que hay que mantener una buena parte de los esfuerzos.
